La narrativa, crecimiento de los personajes

Hablemos de la ficción: la narrativa avanza, se mueve. Toda buena historia exige cambios. Los presonajes evolucionan.

Debemos tener en cuenta que si un personaje entra a una historia de una manera debe salir de ella de otra forma. Algo en él debe modificarse. En el transcurso de la narración —del cuento o de la novela— debe ocurrir algo que altere a ese personaje. Y no importa cómo lo altere, tal vez cambia su manera de ver el mundo, tal vez se vuelva religioso o pase al lado oscuro, tal vez muera o resucite, tel vez se revela o se encierra, tal vez calla para siempre o escapa al otro lado del planeta. 

Muchas veces la narración misma nos lleva al encuentro de ese cambio.

Es esa torsión en el personaje la hará que tu historia atrape al lector y, quizá, que jamás la olvide.

Te propongo algo: buscá una historia que te haya gustado mucho —cuento, novela, película— analizá el personaje. Fijate qué es lo que te atrapó de él. Seguramente descubrirás que ese algo que quedó en tu recuerdo tiene que ver con el avance de la narrativa.